Creciente, adornada de intimidad,
la mañana se instaló en la habitación,
el cortinado dilataba la luz
convirtiendo su haz en resplandor
La tenue luz marcaba de tu cuerpo:
su contorno, su tesón;
fue una noche en vilo,
una noche de emoción,
de amor
Estás ahí,
aun puedo sentir
aquella sensación
el deseo, la caricia
el brillo de tus ojos
y un poco de temor
Sin buscarte
te he encontrado
eres reina y flor
eres como esa luz difuminada
eres esa noche y más
eres el amor
jueves, 9 de junio de 2011
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