calida transparencia que aborda sentimientos,
sueño que sueña el calor de tus entrañas.
JBV
Cree que no la veo, que no siento su boca sobre mi cuando el cadáver suena en un acompasado y armonioso repiquetear de teclas, mis manos van siguiendo los acordes de una música sensual que ilumina el amplio techo de las terrazas, diseminadas formas que el caprichoso fantasma de nubes va dando tono grisáceo a la tarde de los espectros.
La veo acostada con su mano en la entrepierna, por momentos entrecierra los ojos, se que piensa en un espeso líquido y en las alas de la libélula, me gustaría salvarla de la soledad que la acompaña, pero soy su efecto extracorpóreo, su luz en esta grisácea tarde. Detrás suyo una mujer lava ropa en la desilusión de un agua vespertina, diaria y turbia.
Disemina la sustancia de su locura sobre las vecindades desde las terrazas desoladas de piedad. Intenta volar hacia mi buscando el sosiego de mi éxtasis, piensa en ello en una obstinada y secuencial tarea plagada de sinpiedades.
Leo un primer párrafo sangrante en su pierna:” Uno Aprende.” es Borges tallado en su misma piel con la sangre de su indómita materia.
Ella busca el taiji que nos ampare, ese techo que cubra nuestros deseos. Soy su diseño, la materia escrita de su pensamiento. Me ha descubierto en la mirada de los pájaros, más cercanos a las alturas.
Somos universo, contracara, luz /oscuridad, mente/cuerpo sin un estado puro ni en absoluta quietud sino en infinita transformación.
Su creación: yo, sucedió en otro tiempo, pero dejó marcas inalterables, inscritas en el libro del camino y de su virtud que predica lo eterno y permanente, enfatizando valores femeninos, Lugar donde impera la fluidez y suavidad del agua. Buscando el lado oscuro y misterioso de las cosas.
No eres completamente tu ni soy completamente yo, pero no existes sin mi, como al día le pasa con la noche, disminuyes las crecientes y aumentas mis disminuciones. Ese resto que completa y termina de conformarme tal cual soy, sobrevive en ti y es infinita parte de lo que eres.
sueño que sueña el calor de tus entrañas.
JBV
Cree que no la veo, que no siento su boca sobre mi cuando el cadáver suena en un acompasado y armonioso repiquetear de teclas, mis manos van siguiendo los acordes de una música sensual que ilumina el amplio techo de las terrazas, diseminadas formas que el caprichoso fantasma de nubes va dando tono grisáceo a la tarde de los espectros.
La veo acostada con su mano en la entrepierna, por momentos entrecierra los ojos, se que piensa en un espeso líquido y en las alas de la libélula, me gustaría salvarla de la soledad que la acompaña, pero soy su efecto extracorpóreo, su luz en esta grisácea tarde. Detrás suyo una mujer lava ropa en la desilusión de un agua vespertina, diaria y turbia.
Disemina la sustancia de su locura sobre las vecindades desde las terrazas desoladas de piedad. Intenta volar hacia mi buscando el sosiego de mi éxtasis, piensa en ello en una obstinada y secuencial tarea plagada de sinpiedades.
Leo un primer párrafo sangrante en su pierna:” Uno Aprende.” es Borges tallado en su misma piel con la sangre de su indómita materia.
Ella busca el taiji que nos ampare, ese techo que cubra nuestros deseos. Soy su diseño, la materia escrita de su pensamiento. Me ha descubierto en la mirada de los pájaros, más cercanos a las alturas.
Somos universo, contracara, luz /oscuridad, mente/cuerpo sin un estado puro ni en absoluta quietud sino en infinita transformación.
Su creación: yo, sucedió en otro tiempo, pero dejó marcas inalterables, inscritas en el libro del camino y de su virtud que predica lo eterno y permanente, enfatizando valores femeninos, Lugar donde impera la fluidez y suavidad del agua. Buscando el lado oscuro y misterioso de las cosas.
No eres completamente tu ni soy completamente yo, pero no existes sin mi, como al día le pasa con la noche, disminuyes las crecientes y aumentas mis disminuciones. Ese resto que completa y termina de conformarme tal cual soy, sobrevive en ti y es infinita parte de lo que eres.